UGANDA: Iglesia se cierra después de repetidos ataques
Fuente: Morning Star News
Pastor Moreen Sanyu
Una iglesia en las afueras de Kampala, la capital de Uganda, se cerró a principios del mes de agosto después de meses de hostigamiento por parte de los musulmanes locales. El golpe final se produjo el 4 de agosto cuando una piedra fue arrojada por una ventana, golpeando en la frente al Pastor Moreen Sanyu de la Iglesia Gran Amor y dejándolo inconsciente. Después de recuperar la conciencia, descubrió que la mayoría de los miembros de la iglesia habían huido para salvar sus vidas. Luego del tratamiento en el hospital, y la confirmación de que no hubo lesiones graves, fue dado de alta.
El domingo siguiente, cuando el pastor llegó a la iglesia, encontró el edificio vacío. Nadie fue al servicio. La iglesia, ubicada en un área predominantemente musulmana, comenzó en mayo de 2017 y creció rápidamente a 400 asistentes. Sin embargo, en respuesta a los ataques de los militantes islamistas, la asistencia comenzó a disminuir. Después de meses de soportar el impacto de las rocas, junto con el lanzamiento de amenazas abusivas, los líderes de la iglesia han decidido no continuar reuniéndose en esta área tan peligrosa; buscan mudarse a otra parte.
El pastor Sanyu insiste en que la Iglesia no apuntó en evangelizar a los niños en su ministerio: «Acabo de compartir el Evangelio de Cristo y su amor por la humanidad con mis vecinos musulmanes, ellos aceptaron la fe cristiana, especialmente cuando muchas personas enfermas fueron sanadas cuando ore por ellas, no los persuadí ni los forcé para que se reunieran en mi iglesia.
A medida que el pastor y otros miembros de la iglesia consideran cómo proceder para ministrar en el futuro, oremos para que las oportunidades de compartir el amor de Cristo continúen abundando. Pidámosle al Señor que les conceda la fortaleza requerida para resistir a pesar de la oposición, y que los responsables de estos ataques sean condenados hasta el punto del arrepentimiento. El Pastor Sanyu se siente muy animado por la seguridad de que El es el Señor de los vanos.