Yo sanaré tu rebelión.

Un creyente que está fuera del alcance, fuera del ajuste con Dios, no produce el fruto del Espíritu.
Algunos de los capítulos más cortos de la Biblia son los de mayor peso, los más conocidos, los más apreciados por todos. Con la excepción de la gran parábola de Cristo en Lucas 15, Oseas 14 puede ser el capítulo que más admirablemente formula y considera el caso de uno que se ha distanciado de Dios y desea la restauración del favor de Él.

Derek Kidner tituló con acierto su exposición sobre el libro de Oseas Love to the Loveless (Amor para el que no tiene), porque este es el conmovedor tema del libro. Es demasiado fácil perder el contacto vital con Dios en el sórdido mundo al cual somos llamados a vivir y servir. La pérdida del ajuste espiritual a menudo no es planeada ni deliberada, no obstante es trágica si no se reconoce ni se enfrenta. El escritor de Hebreos tuvo tal posibilidad presente cuando escribió: «Y el Dios de paz … os haga aptos en toda obra buena para que hagáis su voluntad» (He 13.20, 21).

La expresión que él usa para «os haga aptos» puede ser usada para la reparación de los huesos rotos que están descoyuntados. Su significado fundamental es «reparar lo que está roto». Así que podemos leer esto como: «los ajuste correctamente». Un brazo dislocado pudiera servir de ilustración. Su necesidad urgente es que se ajuste de nuevo con el resto del cuerpo. Solo entonces, la fuerza vital del cuerpo capacitará al brazo para su verdadera función. De igual modo, solo los cristianos que están en correcto «ajuste espiritual» pueden cumplir su función en el cuerpo de Cristo.

Dios demanda, en primer lugar, el arrepentimiento. No una confesión vaga y genera.El mensaje de Oseas, la más tierna de todas las profecías, procura motivar a Israel a buscar la reconciliación con Dios. Brota de las profundidades de la propia tragedia doméstica del profeta; de ahí sus rasgos conmovedores. Los pasajes en los cuales estamos interesados se refieren en primer lugar a Efraín, la tribu dominante, y el nombre señala aquí al reino del norte. El libro es un diagnóstico de la causa de su decadencia espiritual y revela el camino de regreso. Su mensaje también es válido para la Iglesia actual.

WRITTEN BY: Oscar Mauricio Escobar Porras

“Soy un creyente nacido de nuevo el 25 de Febrero 1983. Trabajé como misionero entre los Wounaan en el Rio San Juan entre Chocó y Valle del Cauca, Colombia desde año 1989 hasta el 2012, cuando me fui a Chile, donde estuve apoyando en el pastorado a la Iglesia Bautista Bethel de Calama, Antofagasta, mientras encontraban un pastor de tiempo completo; también estuve como pastor obrero en la Cruzada Cristiana en el Bajo Calima, Buenaventura Colombia. Actualmente hemos decidido, después de orar al Señor, con mi esposa e hija, abandonar mi empleo secular, Isaías 26:13, como médico, e ir a instalarnos a una zona rural, a fin de iniciar unos estudios Bíblicos, con sus habitantes, con la grande esperanza que El Señor, conceda levantar una Iglesia que le adore en espíritu y en verdad, que le ame con todo su corazón, con toda su alma, con toda su mente y todas sus fuerzas, abandonando toda la mundanalidad que hoy se ha infiltrado en muchas iglesias llamadas Cristianas; y estoy terminando mi Maestría en Estudios Bíblicos en el TMS en USA. He estudiado Diplomados en Teología y en Misiones Mundiales en el Seminario Reina Valera en USA; Consejería Familiar bajo el Club 700 de USA, y Misionología Transcultural en Crisalinco en alianza con el Instituto Lingüístico de Verano bajo el Lingüista y Traductor del N. T. a la lengua Wounmeau, Rond Brinder, en Bogotá, Colombia. Secularmente, también soy Técnico de Refrigeración y Calefacción, así como Técnico de Motores Fuera Borda y afines. Nuestro lema y ferviente deseo de nuestros corazones, "Que la Iglesia se vuelva a las sendas antiguas" no sea que el Señor nos discipline como lo hizo con Israel, en las ocasiones que se alejaron de su Palabra. Solicito en el amor de Cristo, sus fervientes oraciones, por los propósitos de éste esclavo del Señor, dentro de su voluntad.”